Empezaré con la productora Cadinot, que cuida bastante bien el diseño de sus carátulas, aparte claro está, de que tiene unas pelis que a mí personalmente me gustan; y eso que no soy consumidor habitual de video porno, tan solo lo que bajo de internet, jejeje.
Esta colección no tendría ninguna gracia si no incluyera también la contracarátula, que es donde están algunas escenas de los protagonistas en acción.
Si teneis más caratulas de esta productora, o de mayor tamaño, os ruego que me las enviéis.
Hace ya 25 años que Jean Daniel Cadinot (el abuelo de la pornografía francesa) se inició en la producción de películas, sus primeras producciones son también documentos de gran valor, porque eran los días donde los condones no se usaban. Maravillosos efebos se hartan de follar como auténticas bestias sin ninguna otra barrera que sus imaginaciones. Muchas escenas al aire libre, orgías muy eróticas, jóvenes veinteañeros de la época que se entregan al 100%.
Cadinot se desmarca del porno yanqui o de Bel Ami apostando por una estética más amateur, jugando la baza de la cotidianeidad con jóvenes actores franceses o norteafricanos.
Cuenta Cadinot que con doce años descubrió el placer homosexual. Católico practicante, Daniel se confesaba cada día hasta que un cura, demasiado curioso, le hizo perder la fe y convertir la religión en su peor enemigo.
A los 16 años descubre la fotografía gracias a Richard Avedon. Para poder pagar sus estudios como fotógrafo trabaja de: mensajero, buzoneador, dj en clubes nocturnos, ayudante de decoración, vendedor de zapatos... Experiencias que se reflejarán más tarde en sus películas.