Si habéis tenido la oportunidad de ver una película japonesa pornográfica editada para el mercado japonés os habréis dado cuenta con asombro que los primeros planos de los aparatos genitales quedan siempre difuminados con una mancha borrosa. Esto ocurre por un extraño sentido de la censura del país nipón que pese a permitir el consumo de películas o revistas pornográficas, éstas quedan totalmente “capadas”.
Esto también ocurre en los hentai (dibujos manga de alto contenido erótico), donde tampoco es demasiado bien visto el dibujo explícito de penes o de vello púbico. Sin embargo hecha la ley, hecha la trampa, y rápidamente un ejército de demonios tentaculares comenzaron a aparecer en los hentai y a popularizarse entre esos lectores de manga. Los monstruos tentaculares de esta manera fueron ganando su espacio, y además dieron rienda suelta a una serie de fantasía sexuales que siempre estuvieron presentes.
El artículo 175 del código penal japonés prohíbe la publicación de material "moralmente perjudicial", que tal como se interpreta actualmente incluye la exposición de genitales, así que es frecuente ver una barra cubriendo los genitales, o bien los genitales borrosos. Antes de 1994, la interpretación de esta ley incluía la prohibición de exponer vello púbico, una norma que se eludía dibujando personajes sin vello púbico.
Sin embargo, esto ha causado otro problema cuando los vídeos hentai se distribuían a lugares como Europa y Estados Unidos. Como los personajes del anime parecen más jóvenes que los personajes de la misma edad de los dibujos animados occidentales, eso dio a algunos la impresión de que los vídeos contenían pornografía infantil.
Un dato menos conocido es que la censura japonesa es muy estricta en cuanto a los dibujos sobre actividad sexual entre humanos y animales. Aunque se permite que circulen con relativa libertad actos con monstruos imaginarios (que suelen tener los conocidos tentáculos fálicos con el fin de evitar la ley relativa a los genitales de verdad), se ha considerado el sexo zoofílico con animales existentes como algo que debe ser perseguido.
Aunque los dibujos Manga (Hentai) no están entre mis preferidos, no se puede hacer un blog con fuerte protagonismo de arte gay, sin dedicarle al menos un Post a este tipo de dibujos; así que aquí os muestro una pequeña selección.